¿Qué es una Fianza?

Es una póliza de seguros, o garantía, que una aseguradora emite por las obligaciones contractuales que tenga su cliente ante la parte contratante, quien es designado como el beneficiario de la póliza.

Esta garantía es una obligación de carácter accesoria, pues garantiza el cumplimiento de una obligación principal, por tanto, si el contratista o cliente de la aseguradora incumple los términos de un contrato, la empresa de seguros debe honrar el pago de la póliza por el perjuicio causado al contratante.

 

Partes que intervienen en una fianza

La fianza es un contrato tripartito donde intervienen las siguientes partes:

ASEGURADOR O AFIANZADOR: Es la empresa de seguros que responde ante el incumplimiento de la obligación de su cliente.

CONTRATISTA O AFIANZADO: Es el cliente de la empresa de seguros, responsable de cumplir con los términos y condiciones contractuales frente a la parte contratante.

CONTRATANTE O BENEFICIARIO: Es quien otorga un contrato y quien protege los riesgos contractuales mediante el requerimiento de una fianza.

Adicionalmente, podría participar en una fianza:

GARANTE: Es la persona que se compromete con sus bienes de forma colateral a cumplir la obligación contraída por el afianzado ante la aseguradora en caso de que el afianzado no cumpla.

 

La importancia de las fianzas

Al incluir una fianza como requisito contractual, el contratante transfiere los riesgos de incumplimiento de un contrato a la aseguradora, lo que facilita la relación entre el beneficiario y el contratista.

Por otro lado, al utilizar la fianza como medio de garantía le genera ventajas económicas a un contratista, puesto que establece un procedimiento alterno de garantías que avalen su labor sin afectar sus fuentes tradicionales de financiamiento, además de darle por lo general, mayor capacidad para contratar comparado con otros tipos de garantías.